jueves, 19 de abril de 2012

MANIFESTACIÓN ATEA EN MADRID

Convocatoria de manifestación atea en Madrid, obtenida de la web de UAL (Unión de Ateos y Librepensadores).

"El 20 de abril a las 20:00 desde la calle Santa Isabel – Plaza de Tirso de Molina – Plaza de Lavapies y, con los lemas
“No más privilegios. De mis impuestos a las iglesias CERO”
“Por la libertad de expresión y manifestación”."

martes, 3 de abril de 2012

DESCONVOCADA MANIFESTACIÓN ATEA

Reproducimos aquí el escrito sacado de la web de AMAL, por el cual se desconvoca la manifestación prevista para el 5 de abril, así como una valoración de los organizadores sobre la prohibición decretada por la Delegación del Gobierno de Madrid.

 Las asociaciones y grupos organizadores de la manifestación queremos expresar nuestro más enérgico desacuerdo con los argumentos esgrimidos por la Delegación del Gobierno de Madrid y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid para prohibir la misma y por ello exponemos:

• Nuestra intención. Con este acto se pretendía denunciar la inmensa cantidad de dinero, 11.000 millones de euros de los impuestos de todos, que el Estado entrega anualmente a las Iglesias – a la Iglesia Católica Apostólica y Romana en mayor medida. No hemos solicitado ninguna “procesión atea”, sino una manifestación de protesta por estos privilegios económicos, en una época de crisis en la que se está recortando en servicios sociales esenciales (educación, sanidad, pensiones, dependencia, etc.). Son la propia Delegación y algunos medios de comunicación los que han transformado esta denuncia económica en una cuestión política e ideológica.
• El día elegido. El derecho a la reunión, a la manifestación y a la libre expresión es de todos y todos los días. En un Estado democrático y aconfesional, estos derechos fundamentales no deberían estar limitados por el calendario de festejos cristiano ni de ninguna otra religión.
• El lugar y la hora elegidos. El recorrido y la hora han sido estudiados para no coincidir con ninguna procesión católica. Las calles propuestas, tres itinerarios diferentes en el barrio de Lavapiés, discurren en su mayoría por una zona de circulación restringida, por lo que son de escaso tráfico. En esta zona se ubican “numerosas iglesias”…  como en cualquier otra de la ciudad de Madrid. Se han aportado planos demostrando que la distancia entre nuestro recorrido y el de las procesiones superaba los 500 m. Hemos propuesto manifestarnos a las 20h, y también a las 12h, cuando no está prevista ninguna procesión. En ambos casos, se nos ha prohibido el derecho fundamental de manifestación.
• La Semana Santa y el turismo. Nos acusan de falta de respeto hacia la religión pero la propia Delegación y el Tribunal tratan los actos religiosos como atracción turística. Mejor parada saldría la “imagen turística de la ciudad de Madrid” si se mostrase el lado amable y de buena convivencia de la ciudad, que tiene una de sus máximas expresiones en Lavapiés. Permitir esta manifestación sería una muestra de normalidad, tolerancia, variedad de opciones culturales y civismo. Tampoco parece lógico que para proteger la libertad religiosa, se tenga que restringir la libertad de los no creyentes.
• La vulneración del orden público. En el caso de que el orden público se vea alterado por la presencia de contra-manifestantes o grupos antagónicos a esta manifestación, la obligación de la Delegación del Gobierno es defender nuestra integridad física y el derecho a manifestarnos, y no prohibirnos la libre expresión. Todas las ideas, creencias u opiniones pueden y deben ser expuestas a debate.

Hemos decidido desconvocar la manifestación prevista para el día 5 de abril. Sin embargo, manifestamos la inquebrantable intención de seguir reivindicando nuestros derechos como seres humanos sanos y libres. Por ello, interpondremos un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.

Asociaciones y grupos organizadores de la manifestación
“Ningún privilegio a las iglesias. De mis impuestos, a las iglesias CERO”

Madrid, 2 de abril de 2012

domingo, 1 de abril de 2012

MANIFESTACION ATEA JUEVES SANTO

Un año más, y ya van dos, la Delegación del Gobierno de Madrid a prohibido una manifestación atea convocada para el jueves 5 de abril bajo el lema "No más privilegios: de mis impuestos, a las iglesias CERO".

El principal "motivo" que ampara tal decisión es que, según el comunicado de la propia Delegación "La fecha, lugar y hora elegidos por los convocantes, aunque manifiestan en principio una finalidad lícita, lo cierto es que pretenden realizar la manifestación un día de especial significación para los católicos, en el mismo lugar y horario en que se van a celebrar diversos actos religiosos, lo cual pone de manifiesto, cuanto menos, una evidente voluntad de provocación".

Resulta evidente que la manifestación no ha sido convocada "casualmente" para el 5 de abril, Jueves Santo para los católicos. Es obvio que se ha elegido tal fecha para obtener más atención mediática, así como para impactar más directamente sobre las conciencias de los que consideran que la calle es suya y solo suya durante toda esa semana. Sin embargo, ¿puede tacharse tal medida de provocación? ¿el que se celebren "diversos actos religiosos" es impedimento para que no puedan celebrarse a su vez "diversos actos no religiosos"? Creemos que no, y las actuaciones previas en situaciones similares de la misma Delegación parecen darnos la razón.

¿Acaso no se manifiestan los antitaurinos durante la feria de San Isidro delante de la plaza de Las Ventas? ¿Por qué en ese caso no aplican el mismo criterio de provocación? ¿Qué diferecia un hecho del otro, a parte de que en éste no topamos con la Iglesia?

¿Acaso no se manifiestan diversos grupos ecologistas delante de los eventos de moda donde se publicitan diseñadores que trabajan con pieles naturales?

En estos casos que enumeramos, no solo se producen manifestaciones, si no que es habitual que se produzcan o se intenten actos de sabotaje sobre dichos eventos. Sin embargo, la presunción de que tal cosa pudiese ocurrir no parece ser motivo suficiente para limitar la libertad de expresión de aquellos que pacíficamente pretendan difundir sus ideas.

¿Por qué los ateos tenemos un tratamiento distinto? ¿No será por el propio término "ateo"? ¿No será que tal término, en el vocabulario de muchos de nuestros gobernantes, forma parte de la misma familia que otros como "terrorista" o "criminal"? Al fin y al cabo, para la religión católica que muchos de estos nefastos gobernantes profesan ¿no es un crimen negar a dios y manifestarse ateo?

Sinceramente, las razones de la Delegación del Gobierno, más que razones parecen excusas enfocadas a poner límite al atrevimiento de esos colectivos ateos que, no contentos con que les permitan vivir entre las personas decentes, pretenden incluso ejercer derechos que fueron otorgados para el ejercicio exclusivo de las personas de bien.