jueves, 15 de septiembre de 2011

LOS DIOSES ATEOS | Razón Atea

Los dioses ateos | Razón Atea

1 comentario:

  1. Felicitaciones por su blog. Aclara y permite dialogar sobre ideas interesantes. En un contexto de leyes naturales muy perfectas y complejas, ¿será que hay la imperfección de jamás poder medir los humanos qué afirmaciones sobre temas de la ley natural, son verdaderas, o falsas? ¿Seguro que ninguna ley natural permite eso? Y sin medir, ¿cómo podríamos dejar de apostar a dogmas, y llegar a algún acuerdo que armonice opuestos?

    En la polémica arcaica entre teísmo y ateísmo, teístas desean que sea verdadero su dogma: “Dios existe”, tanto como ateos quieren que cumpla su dogma complementario: “Dios no existe”. Pero, aun cuando fulano sea el campeón del mundo para pensar lo que se le antoje, la verdad no es un deseo. La ley natural es como es, sin importar nuestras divagaciones.

    En la “ciencia ficción experimental” SFO, se propone un método radiestésico para medir qué es verdadero o falso en el contexto de la ley natural.

    Hay expertos que utilizan instrumentos de radiestesia, para indagar sobre objetos que están más allá de la percepción ordinaria de los cinco sentidos. Son los radiestesistas. Es posible colocar en el buscador google: “Radiestesia para buscar agua”, y se podrá apreciar cómo las varillas buscadoras se mueven “solas”. Tal como la aguja de la brújula es movida por una energía invisible, hay una fuerza radiestésica que mueve los instrumentos radiestésicos.

    Radiestesistas expertos detectan verdades-naturales-particulares-desconocidas con 80% de precisión, como la ubicación de agua, minerales, petróleo y otros, nunca descubiertos, enterrados donde nadie sabía que estaban. Cavan, y encuentran, con buena precisión, cuando midieron expertos.

    Este autor apostó a que los instrumentos radiestésicos también sirven para medir verdades naturales generales sobre la ley que gobierna al cosmos, y sobre los seres que lo pueblan. Como si Dios existe o no. ¿Verdadero, falso? Ya mucha gente común y corriente lo ha logrado, desde niños de 7 años, hasta abuelitos de 80 años. Se invita a experimentar, gratis, en la página www.internetcosmico.com, bajando el resumen R2 “Mini Curso de Radiestesia Estilo Sathya SFO”, y las “Tablas Radiestésicas”, imprimibles, en pdf, el archivo R4, de la pestaña superior de la página, donde dice “Click bajar resúmenes Rx”.

    Si tanto radiestesista ha conseguido “bajar información del Internet Cósmico”, por llamar de algún modo al campo de información natural del cual han obtenido informaciones, y si después han excavado y en el 80% promedio de los casos las mediciones eran ciertas, a quienes tengan intuición investigadora, ¿no les interesará medir, a ver a qué obtienen? No es difícil de aprender, y es gratis.

    Imaginando, si este método de medir fuera parte de la ley natural, podría significar un portal insospechado de información. Este autor lleva muchos años desarrollando libros SFO, y propone una visión del mundo basada en lo que mide como “naturalmente verdadero”. Tal como en un átomo, digamos, fierro, hay un núcleo, y órbitas con distintos niveles de energía y frecuencia, es medible por ICR, o Internet Cósmico Radiestésico, que hay cinco órbitas-dimensiones de existencia, a distintos niveles de energía y frecuencia, órbitas de “giros” alrededor de un sol, de una dimensión eterna, real, verdadera, existente, de dónde provienen las verdades esenciales. Tales verdades esenciales no son de esta dimensión de materia densa, y no pueden ser captadas por nuestra psiquis terrícola, de modo que no tenemos otra opción que medirlas usando un método transdimensional.

    Eso sí, el método de medición requiere medir con la mente en blanco, desapegándose de los propios deseos. Requiere no desear, al medir: Que Dios no exista, los ateos; y que Dios exista, los teístas. Por favor, ser ecuánime y realizar la hazaña de no medir los deseos peresonales. Según radiestesistas expertos, más del 90% de las personas pueden medir usando péndulos, y no lo saben.

    Que les vaya bien.
    Atte.: Alberto Brehme P.
    www.internetcosmico.com

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